El diseño web iterativo se traduce en un proceso que reúne a los diseñadores, programadores y profesionales del marketing y clientes en un solo equipo interdisciplinario para que se enfoquen en un proyecto único y elaboren un producto viable mínimo. Este metodo entrega las siguientes ventajas:
Reducir riesgos de forma temprana, ya que al desarrollar un MVP se evita que la marca pierda la oportunidad de conectarse con sus propios clientes por no contar con un producto web finalizado o que la competencia se adelante y jale el tráfico a su sitio web.
La iteración reduce al mínimo la posibilidad de que las agencias sigan las hipótesis de diseño incorrectas o elaboren funciones que no aportan ningún valor al producto, ya que incorporar nuevas funciones continuamente crea un flujo continuo de información que ayuda a construir mejores plataformas digitales.
Un MVP es una plataforma para aprender y mejorar. A partir de datos prácticos que proporcionan los clientes reales se puede mejorar la experiencia de usuario con cada nuevo lanzamiento, además el desarrollo iterativo hace que sea mucho más rápido y barato modificar el sitio web.
Los clientes reciben sitios web o productos de software como un servicio que se encuentra en un estado de mejora continua. En lugar de rediseñar un sitio por completo cada cinco años, los clientes pueden concentrarse en mejorar gradualmente su experiencia de usuario guiados por un flujo de datos constante.
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